Wednesday, October 15, 2008

Reencuentro orgásmico (VERSION ISABEL)

Pues bien, la primera vez que voy a escribir en un Blog es el 13 de octubre de 2008 y es para el Blog de Les (tiene un nombre relativamente corto y me gusta que sea aún más corto pero eso tiene su propia historia).
Me haces la propuesta y es como si fuésemos niñas y me invitaras a jugar el juego favorito. Vamos a jugar a escribir, a regalarnos palabras, a contarnos la historia de diferentes formas. Nuestra historia que es tan distinta y tan igual.
Antes de encontrarnos, Fátima que siempre está sorprendiéndome me dijo con la misma certeza con la que sabe su nombre que ella y Elías se conocieron antes de nacer y se habían hecho amigos.
Fátima no lo sabe y Enrique Peña Nieto tampoco, pero mientras el tren suburbano con su promesa de “el camino hacía el bienestar” demoraba media hora en llegar yo pensaba en esa cuestión que nos tenía desde hace un buen tiempo a Mariangel, a ti y a mi empeñadas en ese encuentro. ¿Porque ustedes? ¿Porque yo? ¿Cuándo empezamos a ser amigas?, ¿Por qué no fuimos tan cercanas antes? ¿En qué consiste que hoy haya circunstancias que nos provoquen ese impulso de compartir orgasmos emocionales?
¡Carajo! Ese es el lenguaje que siempre uso en el diálogo conmigo: decenas de preguntas alrededor del asunto. ¿Pero qué más daba? Lo cierto es que sí, como al final lo concluimos esa sería una tarde de orgasmos, pero de esos que provoca el placer de una cierta compañía, de una cierta charla, salpicada de seriedad de mujeres, de cosas simples de las niñas que no hemos dejado de ser y de la complicidad en el juego de Elías y Fátima, las dotes de fotógrafos aficionados de ambos en Bellas Artes.
Cierto, fuimos a esa plaza en función de estos dos pero terminamos encontrándonos de frente con nuestro lado más lúdico.
Por unas horas nos entregamos a la travesura de un helado que no compartimos ni con ellos porque era nuestro momento chocolatisssimo; a la exploración del pasaje esotérico y a creer por un rato en el “le leo las cartas”, “te prometo la prosperidad”, “ese es mi horóscopo”.
Y así entre la doble moral, la ironía de la pena y el gozo simultáneos por la desdicha de una tercera de cuyo nombre prefiero no acordarme, descubrimos el lado sexoso de una Rana René y que ¡las derrotas benditas nos han permitido crecer tanto! Pero que Mariangel no ha perdido su bellísima sonrisa, ni Leslie el brillo de curiosidad pequeña en la mirada, ni yo las ganas de compartirme con ambas.
¿Cuánto cuesta la compañía? Me queda la certeza de que mientras haya instantes como este no necesitaremos averiguarlo. Celebro no haber preguntado el precio de los perros artificiales (¡pero que respiran!) porque me quedo saboreando la compañía de esa tarde donde por unas horas, por no se cuanta vida coincidimos.

Monday, October 13, 2008

Reencuentros orgásmicos y solidaridad dolorosa.

En función de Chabela y Mariangel que son todas unas mamacitas, tuvimos que buscar una plaza con juegos donde Elías pudiera desfogar su hiperactividad y Fatima alentara su astucia e inteligencia.
Llegamos pues a la plaza de las Estrellas y entre hamburguesas culpables de llantos frente al espejo y lamentos en los probadores y el exquisito placer de vernos de nuevo, tuvimos orgasmos emocionales embarrados de chocolate y solidaridad en momentos reconfortante, en momentos dolorosa.
Fue un reencuentro maravillos con charlas sobre la funcionalidad del pene y la infidelidad incompleta. Sobre la monotonía en la cama o el sexo desenfrenado.
Soltamos frases que son pruebas fehacientes de la fortaleza que ahora tenemos.
Hablamos de los Enriques, de Eve, de Ramón, del del Baile de la Arrolladora Banda Limón, del amigo de Mariangel y traspasamos el límite nacional, porque llegó a nuestra plática el argentino, el peruano, el suizo...en fin...una excelente charla de amigas, de esas amigas que se comprenden, que se despiden pensando en que la próxima vez que se vean será igual de exquisito.
Somos tan fuertes delante de los demás y tan vulnerables una frente a la otra, somos tan bonitas y nos sentimos tan ingenuas aún. Somos parte la una de la otra, después de habernos dado tanto.
Una tarde exquisita donde a pesar de los huracanes...volvemos a estar paradas las unas frente a las otras para reconocernos parte de nuestra vida...y seguimos enteras.
Las quiero!