Nunca pensé que podría ser un fantasma. Los semáforos en verde, las mujeres pensando en los orgasmos, los hombres pensando en el sexo de la próxima noche, el señor de los periódicos rememorando las cuentas para pagar la renta, la señora pensando en la escuela del niño, ese hombre pensando en cómo mentir esta noche, los dos jóvenes de allá junto a la fuente pensando cómo esconder un kilo de mariguana. La gente sigue toda ahí inmersa en pensamientos que rigen cada una de las acciones. Pero yo he dejado de estar ahí, he dejado de pensar en ti.
Estoy absorta, sorprendida, extrañada, hipnotizada. Soy un fantasma, aquí y así me dejaste, en el absoluto espacio de la nada y no hago más que sentir una infinita tristeza...ayer estabas todavía, no puedo avanzar, sólo puedo mirar y sentir y siento, entonces siento cada vez con más fuerza. ayer estabas todavía, pero luego me abandonaste entera y completamente y me dejaste aquí como un fantasma y nunca, nunca regresarás...porque ahora sé que no te quedaste con nada...soy invisble ahora para ti...tanto como un día fui todo...justo así no queda nada.